Consagración a María

Oh María, transforma mi corazón en el tuyo.
Coloca alrededor de él una corona de pureza,
adornado en virtud.

Toma mi corazón, querida Madre,
conságralo como tuyo.
Preséntalo a Dios Padre
como una ofrenda de mí para ti.

Ayúdame, Oh María, cada día
para dar a conocer tu corazón.


Amén.