Bienaventurado San José

Bienaventurado San José, tu intercesión
puede hacer posible las cosas imposibles,
ven a ayudarme en estos momentos de angustia y dificultad.

Toma bajo tu protección las difíciles y graves
situaciones que te encomiendo, para que tengan una feliz solución
de acuerdo a la voluntad de Dios.

Mi amado padre, confío plenamente
y me abandono como un niño pequeño
durmiendo en los brazos de su padre.

Que no se diga que apelé a ti en vano.
Y tú, a través del Señor, todo
se puede lograr en Jesús y María,
enséñame que tu bondad es tan grande como tu poder.


Amén.